Morro Reatino

Situado entre Lacio y Umbría, a medio camino entre las montañas y la llanura de Rieti, Morro Reatino se encuentra entre los pueblos más atractivos de la provincia que, aunque influenciado por la cercana Terni, tiene sólidas raíces y tradiciones en el espíritu de Rieti.



POBLACIÓN

333



SUPERFICIE

15,82 km²



ALTITUD

745 m



Dónde está?

La fortaleza de Morro Reatino, con 360 habitantes, se eleva 745 m. sobre el nivel del mar, 18 km. lejos de Rieti. Morro es uno de los maravillosos pueblos medievales restaurados en los últimos 15 años y en la antigüedad fue el punto fronterizo entre el Reino de las Dos Sicilias y el Estado Pontificio cuyas características estructurales e influencia artística aún son visibles hoy.



Sus orígenes

Seguramente el territorio ya estuvo habitado en época romana y probablemente cerca de él surgió el antiguo Marruvio. Sin embargo, los vestigios romanos encontrados en la zona son bastante escasos: entre ellos, los restos de un acueducto y una moneda de oro con la efigie de Vespasiano. La primera información cierta sobre la existencia de un centro fortificado se remonta al año 1101, cuando el territorio fue comprado por los cónsules del municipio de Rieti. A lo largo de la Edad Media y hasta la Unificación de Italia, el castillo del Morro representó una importante avanzada de Rieti y, en consecuencia, del Estado Pontificio. Durante la República Romana, Morro acogió a Giuseppe Garibaldi, que pasó la noche en el pueblo el 30 de enero de 1849. Las numerosas devastaciones sufridas a lo largo de los siglos por bandas de bandidos dieron origen a la leyenda de Nuestra Señora de Mozzapiedi, según la cual la población probablemente se salvó de un asalto, gracias a la milagrosa aparición de la Virgen, que provocó la mutilación de los pies de los bandidos y su muerte por desangrado. Cuando los habitantes se dieron cuenta del peligro del que escapaban, erigieron una iglesia para agradecer a Nuestra Señora. El topónimo, bastante frecuente en el sur de Italia, fue simplemente Morro hasta 1863 y deriva de la palabra prerromana Morro, que generalmente indica alturas, rocas o montones de piedras.



¿Qué ver?

Morro conserva gran parte de su estructura medieval, aunque muchos de los edificios han sido renovados en épocas posteriores. Hoy en día sólo quedan algunos vestigios de lo que fue el antiguo castillo, las murallas de la ciudad y las numerosas torres. El pueblo es una pequeña joya formada por escaleras y callejones que mantienen el típico suelo de adoquín medieval. La iglesia parroquial de San Lorenzo está enriquecida por un portal que data de 1638, coronado por el escudo del entonces obispo de Rieti, Gianfrancesco Guidi di Bagno. Sobre el altar, un lienzo de la misma época representa a San Lorenzo, mientras que a los lados otras pinturas representan a San Luigi y San Vincenzo Ferreri. La construcción de la Iglesia de la Madonna della Torricella está ligada a dos leyendas diferentes: la primera dice que, durante la Segunda Guerra Mundial, los cañones con los que los soldados debían matar a los habitantes frente a la iglesia, se atascaron gracias a una aparición de la virgen; el segundo, en cambio, habla de una época más remota en la que, a pesar del mal tiempo, se salvaron las cosechas cerca del territorio de Torricella. Otro lugar al que los habitantes del Morro están estrechamente vinculados es la iglesia de la Madonna Mozzapiedi, en cuyo interior se encuentra un fresco que representa a la Virgen. Por último, pero no menos importante, está el hermoso acantilado de Coste Lignano, inaugurado el 8 de junio, que alberga la ermita de San Michele Arcangelo. El acantilado, rodeado de bosques, se eleva 700 m. sobre el nivel del mar se puede llegar a través de 21 rutas, diseñadas y equipadas por el guía alpino Mario Alvise, que próximamente se integrarán con 14 nuevas rutas. La actual administración está interviniendo para crear zonas de picnic en los dos pinares, uno de los cuales ya se ha realizado a lo largo del camino que conduce al haya de Francesco, situado en Rivodutri.